Quién no las conoce, las consagradas botas de San Nicolás, de espuma dura, flocada en rojo y con una caña con flokati blanco, que ya nos hacen esperar la Navidad en Adviento. Sus pequeños representantes también pueden ser rellenados con dulces o sorpresas. Son un bonito regalo para nuestros hijos, así como para amigos y conocidos. Su diseño detallado, unido a un colorido nostálgico, los convierte en una popular decoración navideña. Decora una vez el calcetín del pequeño Papá Noel con dulces navideños, bastones de caramelo o un trineo con nieve artificial. También como regalo para amigos y familiares, o para enriquecer su mesa de regalos: esta decoración navideña siempre llama la atención.